La expresión “pasar una noche toledana” es muy usada hoy en día para referirse a noches de insomnio, estrés o sobresaltos. Pero, ¿sabías que su origen se remonta a leyendas y hechos históricos de Toledo?
La leyenda medieval detrás de la frase
Según la versión más extendida, en el año 797, el gobernador musulmán Amrús ben Yusuf organizó un banquete en Toledo, invitando a los nobles locales con promesas de paz. Sin embargo, en mitad de la noche fueron asesinados y arrojados a un foso, dejando una huella de terror que dio origen a la expresión.
Esa noche de traición y sangre pasó a la memoria como una “noche toledana”, es decir, una noche de miedo y desvelo.
Otras versiones curiosas
Con el paso del tiempo, el significado se suavizó y hoy se usa simplemente para referirse a quien no duerme nada. Pero hay más interpretaciones históricas:
- Sebastián de Covarrubias (siglo XVII): Según este lexicógrafo, la expresión se debía a los mosquitos que atacaban a los forasteros e impedían dormir.
- Gonzalo Correas (siglo XVII): Para este gramático, la frase se relacionaba con la noche de San Juan, cuando las mozas toledanas permanecían en vela esperando escuchar el nombre de su futuro marido.
Curiosidades de una frase histórica
Entre traiciones, mosquitos y romances, la expresión “pasar una noche toledana” ha sobrevivido durante siglos y sigue usándose hoy en el habla cotidiana.
Así que la próxima vez que pases una noche sin dormir, recuerda que detrás de esta frase hay historia, leyenda… ¡y hasta mosquitos!